Riesgos regulatorios en varias líneas de negocio. Algunas de las propuestas del nuevo gobierno en Colombia podrían tener impactos transitorios o de largo plazo en los negocios de energía y carreteras. En particular, se han planteado posibles ajustes a las tarifas de energía, que podrían no solo impactar el negocio de distribución de Celsia, sino también al de generación, bien sea por menores ingresos o por mayores necesidad de capital de trabajo.
Por el lado de las carreteras, se habla de iniciativas, incluyendo un proyecto de ley que busca reducir las tarifas y el número de peajes en Colombia. Esto no solo podría impactar algunas concesiones en operación, sino también generar desincentivos a la inversión privada en infraestructura y mayores costos para los concesionarios y sponsors.
Inflación presionaría la rentabilidad de algunos negocios. Si bien el ajuste en precios del cemento y concreto ha sido relevante en todas las regionales de Cemargos, con alzas promedio de más de 10% anual, el alto precio de los combustibles, la dinámica de gastos de personal y el efecto de los mayores precios de venta sobre la demanda, resultarían en presiones a la rentabilidad de la compañía.
Además, proyectos como la Malla Vial del Meta, que apenas inició su construcción en 2022, podrían tener que incurrir en sobrecostos de insumos y mayores gastos financieros que podrían poner en riesgo la rentabilidad esperada de este proyecto, particularmente considerando que esta APP de iniciativa privada tiene un porcentaje de ejecución bajo y que no cuenta con garantía de tráfico.
Finalmente, estimamos que a nivel consolidado, el retorno sobre el capital empleado del Grupo para 2023 sea de 6.8%, por debajo del WACC promedio de sus inversiones en infraestructura.