Energía y gas siguen dando estabilidad al portafolio:
Promigas y GEB han demostrado una importante capacidad de mantener altas tasas de crecimiento, sin sacrificar los buenos niveles de rentabilidad y aportan cerca del 45% del portafolio de Corficolombiana, pese a las desinversiones en Gas Natural y Gascop en 2020. En ese sentido, el papel que juega Promigas, y de alguna manera también GEB, dentro de la estrategia de crecimiento de la corporación es clave en este contexto, considerando que las carreteras están en una etapa de uso intensivo de recursos y de flujo de caja libre negativo. Además, si bien su crecimiento es moderado pero recurrente en Colombia, las mayores oportunidades de Promigas, y de alguna forma también en GEB, están en Perú, un país que dado su bajo nivel de conexiones y su alto nivel de reservas de gas (5x las de Colombia), aún tiene un potencial de crecimiento muy significativo y donde estos dos jugadores controlan el negocio de distribución de gas.
La gestión de portafolio y la política de dividendos han contribuido al crecimiento:
Si bien el tipo de inversiones y la composición del portafolio es diferente al de otros jugadores locales, los niveles de rentabilidad de Corficolombiana son superiores al de otros holdings locales, con un retorno sobre el capital invertido (incluyendo depósitos) cercano al 10%. Además, pese a que la política de dividendos puede generar un efecto dilutivo en los inversionistas, utilidad por acción y el valor en libros por acción de la compañía han presentado tasas anuales de crecimiento compuesto para el periodo 2015-2T20UDM del 17%, demostrando que esta política de pago en acciones, que consideramos no debería ser utilizada indefinidamente, ha permitido el crecimiento de la corporación, particularmente en esta etapa donde la necesidad de recursos para construcción es indispensable. En este sentido, esperamos que el dividendo decretado en 2021 pueda estar cerca de los COP 2,500 por acción (yield ~10%).
UPA vs. Valor en Libros por acción
Fuente: Corficolombiana